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- Cómo un experto compara la escritura a mano
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Por Douglas P. Lyle
Al iniciar las comparaciones entre dos documentos manuscritos, el examinador busca puntos de similitud y puntos de diferencia entre las normas conocidas y el documento cuestionado. El examinador normalmente evalúa las siguientes características:
- Forma general: El tamaño, la forma, la inclinación, la proporción y los trazos iniciales y finales de las letras son parte de la forma general del escritor.
- Características de la línea: La velocidad de escritura, la fluidez y la cantidad de presión del lápiz utilizada proporcionan pistas sobre las características de las líneas, al igual que el espaciado entre letras y palabras y la forma en que éstas están conectadas.
- Márgenes y formato: El ancho de los márgenes, la consistencia del espaciado y la inclinación entre líneas encajan en esta categoría, que cubre la forma y el diseño general de la escritura.
- Contenido: La gramática, la puntuación y la elección de palabras ayudan a señalar al examinador los errores consistentes, las frases repetidas y otras pistas que sugieren el origen étnico o el nivel de educación de un escritor.
Los examinadores astutos buscan todas estas características cuando comparan documentos o firmas. Ninguna característica hace una comparación precisa, pero una combinación de características puede permitir a los examinadores determinar si los escritos sospechosos y de muestra proceden de la misma persona, lo que en última instancia es un juicio subjetivo. Sin embargo, basándose en las conclusiones, los examinadores pueden decir que los documentos
- Absolutamente coincidente
- Coincidencia con una alta probabilidad
- Probablemente coincida
- No coinciden
No todos los exámenes terminan en una respuesta: El examinador también puede decir que no es posible una determinación basada en las muestras. Sin embargo, ese resultado no es muy común. Si la escritura en cuestión es cursiva (con las letras unidas) o una firma, por lo general un examinador capacitado puede determinar si un individuo en particular la creó. Sin embargo, si se imprime el documento cuestionado, esta tarea es mucho más difícil porque muchas de las características distintivas de la escritura cursiva no están presentes en el texto impreso.
Afortunadamente para los oficiales de la ley, la mayoría de los criminales no son tan inteligentes, lo cual es algo que a menudo se hace evidente en los documentos escritos, donde los errores ortográficos son comunes. Los examinadores forenses de documentos utilizan estos errores a su favor. Cuando se pide a los presuntos autores de documentos falsificados o de notas de rescate que presenten muestras solicitadas para su comparación, los examinadores suelen pedirles que utilicen las mismas palabras que se escribieron incorrectamente en el documento cuestionable. La mayoría de las veces, si un sospechoso es el autor de un documento cuestionable, cualquier error ortográfico también se ve en el escrito solicitado.
Al igual que en el caso de las huellas dactilares, los patrones de rifle de armas de fuego y el ADN, existen varias bases de datos de escritura a mano. El FBI mantiene el»National Fraudulent Check File», el»Bank Robbery Note File» y el»Anonymous Letter File». Los Examinadores pueden comparar algunos documentos cuestionables con estos archivos de referencia.
También existen archivos de alta tecnología, como el Sistema de Información Forense para Escritura a Mano (FISH). FISH contiene documentos escaneados y digitalizados que los funcionarios pueden comparar con otros documentos similares. Los examinadores forenses de documentos comprueban visualmente las coincidencias.